A CASA

23 de mayo de 2012

D.L. Moody habla de un hombre rico que se había enterado de que estaba muriendo de una enfermedad incurable. Llamo a su abogada para poner las cosas en orden y realizar su testamento. Pero este hombre tenía una pequeña hija de cuatro años. La esposa del hombre no sabía cómo explicarle a la niña acerca del significado de la muerte. Por lo que ella simplemente le dijo, «tu papá se va y no va a poder volver.’ Así que la niña entró en la habitación de su papá, miro sus ojos y le dijo: «¿Papá, tienes una casa en ese lugar a donde vas?» Esta inocente pregunta atravesó el alma del hombre. Se dio cuenta que había toda su vida adulta solo se centró en acumular riqueza y poder, pero muy poco sobre lo que realmente importaba. Vivían en una hermosa casa que tenía que abandonar y no sabía a dónde iba.

Mis amigos, ¿eres como este hombre? Una hermosa casa en este mundo, sin embargo, dudas sobre lo siguiente. ¿Está seguro de que cuando llegue ese momento, tienes una casa a donde llegar? Jesús nos dice que el cielo es como estar en casa. Sólo hay una manera de estar seguro que vamos allí. Jesús es el único camino. ¿Le cree, o no? Tener un hogar en el cielo depende de usted confiando en Jesús como su Salvador y Señor.