“Yo soy la luz del mundo; él que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.” – San Juan 8:12
Cuando te quedas en un lugar no familiar, ¿alguna vez te has levantado en la noche sin prender la luz? Lo único que recuerdas es que te tropezaste con una maleta o con una mesa. La última vez que me paso a mí, ?fue tan doloroso! Pero cuando prendes la luz, todo se aclara.
Bueno, un montón de personas están tratando de pasar a través de la vida en la oscuridad-oscuridad espiritual-y hay mucho dolor auto-infligido y caídas innecesarias que pasan, porque la mayoría de la gente en la oscuridad se siente que están haciéndola muy bien por su propia cuenta.
Pero Jesús nos dice que El es la luz del mundo. Lo que quiere decir, es que él es la revelación de Dios, al hombre, y la vida. De lo contrario, estamos en la oscuridad espiritual. Nosotros nos mantenemos cayendo y con la sensación de frustración acerca de todo. Oye, ¿no es hora de que alguno de ustedes encienda la luz, para realmente ver a Dios, y entender la vida? Si lo haces, entonces todo tiene sentido.