Un fenómeno moderno en la era de la televisión es totalmente falso, ya que desarrolla un sufrimiento irracional. Las personas sufren muy intensamente debido a las imágenes que ven, pero en realidad no conocen a estas personas personalmente, y el impacto que genera en las vidas no es el mismo como el que produciría el fallecimiento de algún familiar o vecino.

Esto lo vimos tras la trágica muerte de la Princesa Diana y John F. Kennedy Jr., ellos representa lo que la sociedad considera lo mejor de sus naciones. Los dos eran jóvenes, encantadores, atractivos y ricos. Eran los ideales a los ojos del mundo. Sin embargo, muchos de nosotros no conocemos sino las cosas generales de sus vidas. Sólo hemos sido conscientes de lo que han transmitido por la televisión.

Y esto nos lleva a preguntarnos, ¿Estás más preocupado por las personas que no conoces sino por televisión o bien por las personas reales que están alrededor de tu vida?

Si la respuesta es por la gente que solo conoces de ellas una limitada imagen, entonces estas viviendo en un falso sufrimiento. No es una vida verdadera que sea parte de tu existencia. Pero lo que quiero subrayar es que tengas en cuenta las verdaderas vidas que están a tu alrededor, ellos son relaciones genuinas. Perder alguna vida que este a tu alrededor seria tener una pérdida real. Y el enfoque es que comiencen o crezcan al Señor. La relación con Él es la más genuina que podamos tener en nuestra vida. Desarrolla relaciones significativas con Dios y con el prójimo porque estás son esenciales para la vida real.