«La generación mala y adultera demanda señal, pero señal no le será dada, sino la señal del profeta Jonás.» – Mateo 12:39
Aquí hay una palabra para la persona que dice, «Creo en Dios. Soy religioso. Pero simplemente no puedo creer todo este asunto acerca de Jesús resucitando de entre los muertos. Pero tal vez yo creería si tan sólo pudiera ver un milagro”. No te engañes a ti mismo. Los guardias romanos vieron la resurrección de Jesucristo y optaron por no creer. Los líderes religiosos que ya creían en Dios se involucraron en un plan de encubrir los hechos simplemente porque optaron por no creer. A pesar de que habían visto milagro tras milagro, escogieron no a creer.
Puedes ver que incluso si has visto un milagro, sería difícil de creer por varias razones. Principalmente, se haría difícil de creer por tu orgullo. Tendrías que admitir que estabas equivocado. Pero no sólo eso, sino que tendrías que soltar el control. A nadie le gusta rendir el control. Si Cristo realmente resucitó de entre los muertos, entonces Él realmente es quien dice ser. Y si has irte al cielo, Él va a ser la única manera que lo podrás lograr. Esto significa que vas a tener a alguien más como tu Señor y no tú. Y a ti te gusta estar en control. Te gusta ser el jefe, el señor de tu vida. Eso es difícil de hacer.
Mira, si estás decidido a no creer, inclusive si a un hombre se levanta de entre los muertos y entra en la oficina de alguien, aún habrá muchas personas en esa oficina que elegirían no creer. ¿Vas a ser uno de ellos? ¿O vas a ser uno que tiene la FE para creer?