“El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.” – Colosenses 1:15
Ayer hablamos sobre la Navidad según Pablo y de la razón que él dio para la venida de Jesús a la tierra. Descubrimos que la razón principal por la que Jesús nació fue para salvarnos de nuestros pecados. Hoy, vamos a estudiar más sobre lo que la venida de Cristo nos revela a todos nosotros.
Es siempre fascinante cuando uno ve a una hija parecerse mucho a la madre o a un hijo siendo la imagen idéntica de su padre. Entonces, ¿qué tiene eso que ver con la Navidad? Buena pregunta. En Colosense 1:15, Pablo escribe: Jesús “es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación”. En otras palabras, si tú quieres saber cómo es Dios, lo vas a encontrar en Su Hijo. En todas las maneras, Jesús es la imagen viva de Su Padre.
Esta Navidad, leas el relato del nacimiento de Jesús en el libro de Mateo donde él cita al profeta Isaías, esa profecía pudiera tener un significado extra: “Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre ‘Emanuel’”—esto es, Dios con nosotros.
¿Quieres saber cómo es Dios? ¡Mira a Su HIJO! ¿Quieres conocer a Dios personalmente? Pon tu confianza en Su Hijo.