Hay un proverbio árabe que dice: “El calor continuo del Sol al final crea un desierto.” ¿Has pensado como afectaría esto si lo aplicáramos a tu vida?

Todos queremos que las cosas vayan muy bien en todo momento, pero tenemos que admitir que la vida no funciona de esa manera ya que llegan a nuestro encuentro tiempos difíciles, las relaciones se dañan, los problemas económicos nos asfixian. Todavía puede venir el tiempo de muchas batallas hasta que las nubes lleguen y traigan sombra.

Jesús dijo: “en el mundo tendréis aflicción” Pero la gran esperanza de la noticia es que no se para ahí, sino que además Jesús siguió diciendo “regocijaos, porque yo he vencido al mundo.” Los problemas son parte de la vida, son un hecho innegable e inevitable. Ahora bien, no pierdas la forma en que Jesús nos ha dado la estrategia para encontrar la victoria. Aún con todo, en medio de las dificultades, no nos dejara solos. Nos proporcionara la capacidad de solventar los momentos buenos y malos que tengamos que atravesar.

Jesús es capaz y está dispuesto a proporcionarnos la victoria en medio de las dificultades, aun cuando las cosas están realmente oscuras. ¡Pon tu confianza en que Jesús tiene la salida a lo que sea que estés atravesando!