Nos hemos enfocado en como el Espíritu Santo les da convicción a los cristianos acerca de sus pecados y la necesidad de arreglarse con Dios. Pero lo más sorprendente para mí es que el Espíritu Santo nos convence a todos, incluso a aquellos que no son creyentes. Puedes ser un escéptico o incluso ser una persona completamente desinteresada. Sin embargo, el Espíritu Santo te ha traído a este devocional de aquí hoy. En nuestra referencia bíblica, se dice que Él convence al “mundo” de culpa, “justicia y juicio.” Mis amigos, ¡eso se refiere a todos nosotros!

Puedes ver que el Espíritu Santo convence a los no creyentes cuando escuchan del amor de Dios por ellos por medio de Jesucristo. A veces el Espíritu Santo convence a los no creyentes de la necesidad de rendirse y de dar su corazón y su vida a Dios. Y cuando esto te suceda, se convierte en el momento más crucial de la toma de decisiones en tu vida. Es una decisión de seguir haciendo las cosas de tu manera o de la manera de Dios. El Espíritu Santo te convence y te atrae, pero debes tomar la decisión de si o no vas a dar tu vida a Dios por medio de Jesucristo. Si lo haces eso, entonces el Espíritu Santo vendrá y morará dentro de ti y te dará este deseo interior de obedecer los mandatos de Dios.

Todo eso comienza con el hecho de que Dios, primero, nos amó por medio de Jesucristo. Cristo es la razón por la que queremos amarlo y obedecer Sus