EL MIEDO A PRESENTAR

1 de octubre de 2016

«Pues asi tambiin se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus maridos, como Sara obedecia a Abraham, llamandolo senor. De la cual habeis venido vosotras a ser hijas, si haceis el bien, sin temer ningu.» – 1 Pedro 3:5-7

Despues de leer la Escritura en el devocional de hoy, es probable que haya todo tipo de alarmas, las mujeres que no tienen una relacion con Cristo, y que quieren correr y probablemente algunos de ustedes que quieren hacerlo tambien! Debido a que hemos llegado a ser muy familiarizados con la opresion de la mujer en las culturas musulmanas, se oye palabras como esa palabra sumision y quizas panico. Usted piensa, «Esto es una locura, este tipo de mentalidad.» Darse cuenta de que estas palabras tambien describen a las mujeres cristianas. Por lo tanto, si usted es un cristiano, usted va a ser dificil de entender, incluso en contra de la naturaleza cultural de la Palabra de Dios.

Esto habla de la sumision voluntaria de la devocion a Jesucristo. No porque el marido se lo merece, o incluso a cualquiera de nosotros, pero esta fuera de la devocion a Jesucristo. Y no tiene nada que ver con la desigualdad entre hombres y mujeres. Como cuestion de hecho, ver de nuevo el l escritura (hombres) los tratan con respeto, como a vaso mas fragil y como a coherederas de la gracia de la vida, de modo que nada estorbara las oraciones «el». vaso mas fragil «es solo la fuerza fisica. Ciertamente, las mujeres no son debiles intelectual, relacional y emocional.

En otras palabras, lo que la Palabra de Dios esta diciendo es: «Mira, le dice a los hombres, sus oraciones no seran escuchadas por Dios, si usted no esta honrando a tu mujer como heredera co – igual de la gracia de Dios de Jesus Cristo. «Hombres y mujeres son iguales ante el Senor. Sin lugar a dudas. Solo tenemos diferentes roles en el matrimonio.

Ahora lee esto cuidadosamente. La Biblia no ensena a las mujeres a someterse a los hombres. La Biblia ensena que las esposas deben someterse a sus esposos. Hay una gran diferencia. En el lugar de trabajo y fuera del hogar, las mujeres no tienen la responsabilidad de respetar a los hombres, a menos que sean hombres de autoridad. Los hombres son llamados a presentar a las mujeres que estan bajo su autoridad. Y los hombres, tienen una palabra de sabiduria – cuando el marido exige obediencia, es casi siempre conduce al resentimiento por su esposa. El esposo cristiano debe ser en Cristo. Cristo dio su vida por la Iglesia. Estamos llamados a ser lideres siervos, no demasiado exigente, pero animando a nuestras mujeres para convertirse en todo lo que Dios quiere que sean. Entonces, y solo entonces, la mujer esta sujeta a su marido sin miedo.