«Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.» 2 Timoteo3:16-17
¿Se imagina un libro que comienza con un autor y luego, a lo largo de 1600 años, mas unos 40 escritores diferentes, finalmente se termina? No podrías esperar encontrar un mensaje claro de principio a fin. No, no con todos esos escritores y durante un período de tiempo tan largo, pero eso es exactamente lo que sucedió con la Biblia.
Comenzando alrededor del año 1500 d.C. y terminando alrededor del año 100 d.C., la Biblia esta compuesta por muchos escritores diferentes, pero cuenta un mensaje unificado; una historia. ¿Cómo es posible? A pesar de todos los diferentes escritores, sólo había un autor: El Espíritu Santo. El Espíritu Santo guió a cada escritor de principio a fin, contando una historia coherente, la historia de Jesús. Del Antiguo Testamento al Nuevo, todo apunta a Jesús.
La Biblia describe la Escritura como «inspirada por Dios». En otras palabras, fue inspirada por el Espíritu Santo. Esto es bastante increíble, pero la Biblia no se detiene ahí. También es atemporal. Todas las épocas, del 1500 a.C. al 2017 d.C., la Palabra de Dios todavía se aplica. Se aplica a todas las razas y culturas, a todas las edades y a todos los idiomas. ¿Por qué? Porque la Escritura es infalible. Es perfectamente cierta, ¡puede contar con ello!
¿Así que, es la Biblia es digna de confianza? ¡Absolutamente! Dios nos dio este increíble libro que, desde la primera página hasta la última, cuenta una historia, la historia de Jesús. Y esa es una historia que vale la pena leer. Podría cambiar tu vida.