«Hablando el angel dijo a las mujeres: ‘Usted, no temas, porque yo se que buscais a Jesus, el que fue crucificado. No esta aqui, pues ha resucitado, como dijo.'» – Mateo 28:5,6
Cuando se pierde a un ser querido, queremos que todo el mundo deje de tomar nota. Sin embargo, el mundo sigue girando y la oscuridad puede sumir a nuestra alma.
Un cristiano perdió a su hijo de 18 años. Esta es una muerte trágica, y el padre pensó que su alma estaba en la oscuridad. La Pascua amaneció y realizado ese mismo día difícil para él. Él se levantó temprano, sin poder dormir, sentado solo en la oscuridad de su casa. En la oscuridad por el dolor de perder a su modo, cuando la alegría de la Pascua de Resurrección había previamente le dio mucha esperanza. Entonces vio el amanecer.
Como vio la luz de un nuevo día, escuchó la canción «Aleluya» en la radio. En ese momento sentía que Dios habló con él diciendo: «así como el sol se levanta, me levantó de entre los muertos y también para su hijo».
El hombre se dio cuenta de que no habrá oscuridad en luz, sólo la luz en el cielo. No habrá ninguna muerte, sólo la vida, sólo porque Jesús ha resucitado! Esta es la razón por la que el día de la resurrección es un día glorioso.