LA ORACION

19 de abril de 2017

«Orad sin cesar». – 1 Tesalonicenses 5:17

El Presidente Lyndon Johnson invitó a uno de sus asesores, Bill Moyers, a una cena familiar en la Casa Blanca. Desde que Moyers fue ordenado Ministro, el Presidente lo llamaba para dar las gracias antes de la comida. Moyers empezó su oración, pidiendo en silencio la bendición al Señor. Johnson, al otro lado de la mesa, pronto gritó: “Habla fuerte Bill, no puedo oírte”, a lo cual él replicó: “Yo no estaba hablándole a usted Señor Presidente”.

Muchos de nosotros tenemos problemas al momento de orar. Buscamos las palabras correctas o nos preocupamos de tocar todos los puntos apropiados. A veces pensamos que la oración es más difícil de lo que es, en realidad es muy simple. Todos podemos hablar con el Padre, no sólo los predicadores o sacerdotes.

Pero piensa esto: ¿Cuál es el mandamiento más mencionado en la Biblia? Es orar. De hecho, Dios no sólo nos manda a orar, Él dice orar sin cesar. Ahora, ¿nos diría Dios que hiciéramos constantemente algo que va más allá de nuestras capacidades? No se preocupe por recoger palabras de cinco dólares, o usar correctamente los verbos del Español Antiguo, o de producir profundas verdades teológicas. Sólo háblele sinceramente a Dios y dígale lo que está en su mente. Es tan simple como eso. Y relájese, usted está hablando con su mejor Amigo.