“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos”. – Gálatas 4:4
Los superhéroes de acción han sido una parte de la cultura estadounidense por mucho tiempo. Creo que ahora ya se les refiere simplemente como “Superhéroes.” Cualquiera sea el caso, esos superhéroes (Batman, el Hombre Araña, El Hombre de Hierro, El Hombre Increíble, Superman, etc.) siempre parecen aparecerse al preciso tiempo. Cuando parece que la maldad, los villanos van a ganar, ellos aparecen con sus poderes sobrenaturales (superpoderes) y justo a tiempo resuelven el problema. Tengo que admitir: hay algo sobre eso que es atractivo para todos nosotros. Es muy maravilloso ver el bien triunfando sobre el mal. En especial en estos tiempos cuando miramos al mundo y el mal parece estar ganando una y otra vez.
Lo triste es que esos superhéroes realmente no existen. ¡Simplemente son un disfraz! ¡Son todos ficticios! Sin embargo, hay un Superhéroe que es real que apareció en la historia al perfecto tiempo para involucrarse en un batalla contra el mal que todavía está causando estragos en la humanidad. Él vino, literalmente, para rescatarnos de una manera que salvara nuestra vida, si estamos dispuestos.
¡Qué tiempo más perfecto fue ese en el que Jesucristo nació en Belén hace un poco más de 2,000 años! El Imperio Romano estaba a cargo y era gobernado por un hombre llamado César Augustus. Siendo un hombre increíblemente avaro, fue él quien ordenó que se hiciera un censo, exigiendo que todas las personas fueran a su pueblo natal para registrarse. Para José, quien venia de la dinastía de David, Belén era su pueblo natal, de modo que él y María se fueron a Belén. Fue después de un viaje de unos 112 kilómetros, encontrando descanso sólo en un establo con los animales, que María dio a luz (bajo la lay) a su primogénito Hijo, Jesús. Concebido sobrenaturalmente, Él es Dios, pero también nacido de una mujer, Él es hombre. Él vivió, murió y resucitó otra vez para pagar la paga por nuestro pecado y para ofrecernos perdón. Él hizo posible de que nosotros seamos adoptados como hijos de Dios. Como puedes ver, Jesús es el único Superhéroe REAL. De eso es que se trata la Navidad y es por eso que Él vino.
¿Has reclamado tu herencia?