«Porque el amor al dinero es la raíz de toda clase de males. Por codiciarlo, algunos se han desviado de la fe y se han causado muchísimos sinsabores.» – 1 Timoteo 6:10
Hay muchas frases que muchos piensan que están en la Biblia, pero no. Limpieza es próxima a la piedad. No existe. Dios ayuda a quienes se ayudan a sí mismos. No, no, no existe, tampoco. Pero la escritura no más inapropiada sólo tiene que ser que el dinero es la raíz de todos los males. La Biblia nos dice a todos! Lo que dice la Biblia es «el amor al dinero es la raíz de todo tipo de maldad.» El dinero no es ni bueno ni malo. Pero Dios juzgara nuestra actitud hacia el dinero. Le preocupa cómo adquirir dinero, cómo gastarlo y donde la riqueza ocupa en su lista de prioridades.
Dios dice que usted debe decidir a quién amar más: a Dios o el dinero. Cuando decidimos amar al dinero, puede dar lugar a todo tipo de decisiones comprometidas y nos hace más vulnerables a la tentación. La palabra de Dios nos advierte que si hacemos dinero una prioridad sobre Dios, vamos a traer mucho dolor innecesario en nuestras vidas. En la primera parte del siglo XXI, lo hemos visto con los contadores y ejecutivos de empresas como Enron, WorldCom y Tyco. Ellos, junto con sus familias, empleados, accionistas y proveedores, todavía se enfrentan con el dolor que trae el amor al dinero.
Dios nos permiten ser los cuidadores de lo que proporciona, incluyendo nuestro dinero. Tenga cuidado de no dejar que el amor al dinero se haga cargo de su vida. Vamos a amar a Dios ante todo y darse cuenta de que todo ya pertenece a él de todas maneras. Él quiere que lo amemos y él nos ayudara a administrar su dinero.