“Y cómo yo aventajaba en el judaísmo a muchos de mis compatriotas contemporáneos, mostrando mucho más celo por las tradiciones de mis antepasados”. – Gálatas 1:14
Todo el mundo tiene una historia. Si has vivido cualquier cantidad de tiempo, tienes una historia. La mayoría de las personas tienen una sola parte de la historia. Hoy, vamos a ver la primera parte de la historia de Pablo. Pablo comienza su relato hablando de su vida pasada, cuando estaba en el judaísmo. Ahora, hay que entender que Pablo no era como muchos de nuestros amigos judíos aquí en Estados Unidos que son judíos de nacimiento, que son étnicamente judíos, pero que en realidad no tienen mucho interés en su religión o la práctica de ella. Pablo era muy serio con la práctica de su religión. Hoy, lo llamaríamos ortodoxo.
Saulo (que más tarde se convirtió en Pablo) estaba buscando activamente destruir a los seguidores de aquel, a quien consideraba ser un hereje equivocado y blasfemo conocido por el nombre de Jesucristo. Hechos 22: 4 dice: « Perseguí a muerte a los seguidores de este Camino, arrestando y echando en la cárcel a hombres y mujeres por igual.» Ahora, hasta este punto el cristianismo se conocía como el Camino. ¿Por qué? Porque Jesús Cristo dice: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre, sino por mí.» Y Saulo estaba haciendo todo lo posible para erradicar lo que se creía ser una herejía. Saulo era un clásico terrorista religioso.
Ahora, en una época en la que vivimos con tantos terroristas religiosos, es necesario comprender que estas personas creen apasionada y celosamente que lo que están haciendo está bien y que es algo agradable a los ojos de Dios. ¿Por qué? Porque creen que sirve para erradicar lo que consideran ser una falsa enseñanza acerca de Dios. No es sólo una motivación de odio. Y sí, lo que está ocurriendo es un mal diabólico, pero para el terrorista religioso, hay una ciega auto-justicia de que lo que están haciendo está correcto. Y Pablo tenía ese tipo de mentalidad.
Esto es realmente una descripción de la vida de Saulo en la primera etapa antes de conocer a Cristo. Todo el mundo en la historia de la humanidad tiene la primera parte de su historia. Ahora algunos de ustedes estarán pensando, “¡Nunca ha habido un tiempo en mi vida cuando yo no era cristiano!» Bueno ustedes sufren de alucinaciones. La Biblia es muy clara: nadie hereda el cristianismo. Todos nosotros, en algún momento, tenemos que tomar la decisión en nuestras vidas de que vamos a confiar en Cristo y a seguirlo.
Saulo representa la mayoría de la humanidad en la Primera Parte de su historia. La mayoría nunca llega a la Segunda Parte. Pero, Saulo sí. La Segunda Parte trata con una increíble transformación, milagrosa. ¡No quieres perdértela!