«Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; más el que fornica, contra su propio cuerpo peca.» – 1 Corintios 6:18
¿Cómo podemos tratar correctamente la tentación sexual? Tal vez la mejor forma es evitarlas en primer lugar. Aquí hay algunas ideas para ayudarle a hacerlo.
1. Permanecer al margen de situaciones vulnerables. Sabes, cuando Jesús nos enseña a orar, «nos llevan a no caer en la tentación, sino líbranos del mal», realmente nos pide orar de manera que empecemos a tomar decisiones que nos dan una mejor oportunidad de evitar tentaciones. ¿Qué situaciones vulnerables? Un adolescente el novio y la novia en el hogar donde los padres no están. No tengan ningún bloqueo en tu computadora o tener esa computadora en un lugar privado donde nadie más la pueda ver si no solo tú. O permanecer tarde en la Oficina a solas con una persona del sexo opuesto. Para evitar tentaciones, evitando situaciones peligrosas como estas.
2. No ver a la gente como objetos de deseo sexual. Ver a la gente como en la imagen de Dios, para mostrarles tu respeto y mostrarles amor – no para mostrarles lujuria! Pero demostrar amor auténtico, cristiano. Recuerde: la basura y basura. ¿Cómo vemos a otros tiene un gran impacto en cómo pensamos y qué hacemos.
3. Utilice esta estrategia infalible. ¿Aquí está la clave final: cuando se trata de cuestiones de inmoralidad sexual, la sensualidad y la impureza, preguntarse a sí mismo, ¿podría estar avergonzado si Jesús me viera estar haciendo esto, o pensando en esto? Él lo hace…