UNA PIZCA DE SAL

28 de junio de 2014

«Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis como debéis responder a cada uno.» – Colosenses 4:6

Las escrituras da algunos consejos maravilloso para tener una presencia más eficaz: sazona tus palabras con sal. ¿Cómo es eso? Si alguien rocía sal en los alimentos y facilita el buen gusto, se lo agradecería. Pero si alguien le entrega una cuchara de sal y dice, tómatela toda, es un poco difícil de tragar. De hecho, incluso usted no podrá digerir!

Bueno, creo que como cristiano no siente cuando lo único que hace es hablar de Dios y la Iglesia y Jesús. Nunca hablar de béisbol. Nunca habla acerca de la Oficina. Nunca hablan de política. Nunca habla de las luchas en el barrio. Usted nunca habla de su familia. Nunca habla acerca de las preocupaciones cotidianas que tiene como creyente. ¿Por otro lado, si hablara de todas estas cosas y ocasionalmente espolvorear un poco sobre la palabra del Señor cuando hay la oportunidad correcta, o una visión que aprendió de un sermón, o un versículo de la Biblia podría no saber, entonces podría pensar, bueno, ¿esa sabiduría de dónde viene? Y se despierta su curiosidad, y pueden seguir conversaciones más largas, Y más profundas. Cuando tienes la oportunidad, sólo de salpicar en la conversación con un poco de sal espiritual. Agrega sazón y sabor a la vida.