“Un hombre paciente tiene un gran entendimiento, pero el de mal temperamento refleja su necedad”. Proverbios 14:29
Se ha dicho que la vida es una prueba de paciencia. ¿En donde se le dificulta más su paciencia?
A mí se me dificulta en las líneas de espera, sea en el trafico o esperando en un restaurante. Yo prefiero manejar cinco millas más, que estar atorado en el tráfico. Yo soy impaciente con la gente que me interrumpe al tener yo un plazo para entregar un documento o cuando alguien dice que va hacer algo y no lo hace.
¿En donde se le dificulta más su paciencia? A alguna vez usted orado, “Señor dame paciencia”, déjeme sugerirle unas maneras practicas de aprender paciencia:
1. Respire profundo y ore por control propio.
2. Cuando la gente lo haga enojar, si es posible, retírese por un momento, tómese el tiempo para controlar sus emociones.
3. Confronte el problema y busque escuchar, entender y cuando sea necesario, perdonar.
4. Acuérdese que la mayor motivación para la paciencia el recordar la paciencia de Dios con nosotros.
La paciencia es una preciosa comodidad y es una poderosa manera de ganarse el respecto de otros y hacer de un enemigo potencial un amigo.